
Las personas estamos “diseñadas” para comunicarnos en presencia. Los elementos no verbales de las relaciones interpersonales facilitan el diálogo y reducen los riesgos de malentendido. ¿Cómo conducir equipos remotos sin esas instancias corporales y contextuales de encuentro? ¿Cómo construir un equipo sólido por medios exclusivamente virtuales? De estas cuestiones se ocupa Marisa Vázquez Mazzini en el presente artículo.